Costaría trabajo creer que ustedes -como nosotros- conocen algún cantante esloveno. Et voilà! Aquí viene Brina Vogelnik a sellar ese vacío existencial. Brina es una chica de familia de artistas ljubljianos -de Ljubjana- que, además de dedicarse a espectáculos para danza, televisión y cortometrajes con marionetas y plastilina stop-motion, lo cual ya resulta suficientemente estimulante, lidera un grupo con aires folkies igual de tentador. En una década Brina ha sacado dos discos que figuran entre lo más comentado de la World Music europea.
Échenle un vistazo y saquen sus propias conclusiones (¿rollo Luar Na Lubre en jovial y exótico?). Y si les gusta el tema, que si violín celta, que si aires centroeuropeos trufados de palabras tan enigmáticas como evocadoras, la tienen en directo el jueves 26 de junio en el
Antzokia.
Costaría trabajo creer que ustedes -como nosotros- conocen algún cantante esloveno. Et voilà! Aquí viene Brina Vogelnik a sellar ese vacío existencial. Brina es una chica de familia de artistas ljubljianos -de Ljubjana- que, además de dedicarse a espectáculos para danza, televisión y cortometrajes con marionetas y plastilina stop-motion, lo cual ya resulta suficientemente estimulante, lidera un grupo con aires folkies igual de tentador. En una década Brina ha sacado dos discos que figuran entre lo más comentado de la World Music europea. Échenle un vistazo y saquen sus propias conclusiones (¿rollo Luar Na Lubre en jovial y exótico?). Y si les gusta el tema, que si violín celta, que si aires centroeuropeos trufados de palabras tan enigmáticas como evocadoras, la tienen en directo el jueves 26 de junio en el Antzokia.
1 comentario:
Y al partido de Ejpania, que le den. Menos fútbol y más pan cultural. Nos vemos allí
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